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La adolescencia de la primera infancia

Hay una edad, sobre los 2 a 3 años, que nuestros hijos e hijas pequeñas parecen adquirir una nueva rebeldía. A mí me gusta pensar en esta etapa como "la adolescencia" de la primera infancia.



La palabra adolescencia tiene referencia en el latín, significando crecimiento y movimiento, habla de una etapa de expansión y cambios.

Y al igual que en la juventud, sobre los 2 años nuestros pequeños niños y niñas comienzan a tomar conciencia del entorno, de sus pensamientos y deseos. Comienzan a desarrollar cierta autonomía en ciertas acciones cotidianas, y quieren explorarlas lo máximo posible.


Al igual que los adolescentes, estos pequeños querrán explorar y experimentar, socializar y aprender. Los podemos ver disfrutar de estar con otros niños y comienzan a desarrollar sus primeras herramientas sociales.


¿Cual es la contracara? en esta exploración y descubrimiento de sus deseos y pensamientos, muchas veces se resistirán a nuestras acciones o indicaciones. Quizás volver del parque se convierta en una misión imposible, o elegir una remera pase a ser una tarea dificil. A veces parece que no saben qué quieren, y en las situaciones más insólitas nos encontramos con explosiones de enojo (más conocidas como berrinches).


¿Cómo podemos acompañar respetuosamente? Al igual que en la adolescencia: mucha paciencia y reglas claras.

A mí me gusta maravillarme en cada etapa del crecimiento. Cuando somos conscientes de qué está sucediendo en sus cerebros, podemos entender que colocarse unos zapatos lleve más tiempo o que elegir el color de un vaso para tomar agua sea una elección dificil. ¡Están tomando sus primeras decisiones! Piensa en cuánto te cuesta a ti tomar una decisión (persona adulta con la corteza cerebral madura).


Por otro lado, también entiendo que las reglas familiares no negociables tienen que estar claras. Por ejemplo, puedo enojarme porque quería el vaso rojo en vez del azul (y justo mamá me sirvió la leche en el azul), pero no puedo pegar o tirar el contenido del vaso por estar enojado.


Te invito a enamorarte de esta etapa, siendo consciente que se están construyendo las primeras experiencias de instrospección, de descifrar los deseos, evaluar consecuencias... ¡cuántas cosas! y como padres y madres tenemos el honor de acompañarles en el proceso.


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